El 21 de septiembre de 2001, a las 10:17, una explosión ocurrida en las instalaciones de la compañía química AZF (AZote Fertilisants), sacudieron a la ciudad francesa de Toulouse. A 10 años de la tragedia que dejó 31 muertos, 2.200 heridos y 10 mil víctimas, la tesis oficial habla de "accidente", aunque no se pudo demostrar científicamente cómo se produjo.
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